Deplorable la decisión del intendente de la ciudad cordobesa de Tanti, Luis Azar. Desmanteló la única cancha de básquet para ciegos del mundo, inaugurada hace ocho años en el Paseo de los Artesanos de aquella ciudad turística. Se desconocen las reales motivaciones que lo llevaron a borrar de un día para el otro, un escenario de juego adaptado, donde el 23 de marzo del 2011, los ciegos jugaron el primer partido de básquet del mundo, noticia difundida por la Agencia Télam y que recorrió el planeta entero.

Comparto el dolor y desazón del amigo, Ricardo Jesús Molinari, el inventor de la pelota, el tablero, la cancha y el juego adaptado, para que ciegos y personas con discapacidad visual jueguen al básquet. .La pésima medida adoptada por el intendente Azar, es una ofensa y un acto de discriminación hacia toda la comunidad de ciegos del país. Al mismo tiempo, desprecia la historia y un monumental trabajo de inclusión social a través del deporte, que desde hace años viene llevando a cabo Molinari, junto a un equipo de profesores, “ad honórem”, poniendo tiempo, sacrificio y dinero de su bolsillo.

Me consta, soy testigo del esfuerzo de este hombre que supo mirar con los ojos del corazón, y que hace más de 20 años viene golpeando las puertas del poder de turno en busca de ayuda oficial, para que se desarrolle básquet para ciegos. Lejos de encontrar apoyo, Molinari siempre tuvo la mala fortuna de toparse con funcionarios impresentables, insensibles, e inútiles.

Algunos incluso, hasta se mostraron más propensos al negocio personal, antes que pensar en el beneficio de los ciegos, o de patrocinar un invento con patente Argentina e ideado por un argentino. Otros, directamente nunca lo atendieron en sus despachos oficiales, y prefirieron excusarse por mail, o mandaron a un “cuatro de copas” a que lo llame por teléfono a Molinari, para decirle otra de las tantas mentiras.

Y no faltaron también, los que operaron (y operan) desde los medios de comunicación para que Básquet para Ciegos, no tenga difusión (no vaya a ser cosa que este deporte adaptado crezca y opaque a FÚTBOL PARA CIEGOS, que sí tiene sponsor y hay un buen dinero de por medio…).

Por estas y muchas razones más, entiendo el enojo y decepción de Ricardo Molinari, quien, hastiado de la hipocresía e indiferencia de los dirigentes, funcionarios y políticos argentinos, ahora viajará a Europa a presentar su inédito invento: “Si básquet para ciegos lo desarrollan en Europa, tal como me aseguran dirigentes e instituciones que nuclean a ciegos de allá, como en España, por ejemplo, más temprano que tarde llegará IMPORTADO a la Argentina, y así posiblemente sea bienvenido. Si viene de afuera, ahí sí. Es incomprensible, pero así funciona este país", lamentó Molinari.